Especialidades médicas con mayor riesgo de demanda
En el campo de la medicina, todos nos enfrentamos a diversos riesgos, y uno de los más temidos es ser demandados por negligencia médica. Aunque nadie desea encontrarse en esta situación, es importante reconocer que existe la posibilidad de que ocurra.
Es crucial tener en cuenta que no todas las demandas por negligencia médica son responsabilidad exclusiva de los profesionales de la salud. En ocasiones, los pacientes también pueden tener cierta responsabilidad en los eventos adversos, incluso un error de comunicación puede desencadenar consecuencias graves.
En México, la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) es la autoridad encargada de mediar entre médicos y pacientes en casos legales. Es ante esta institución que deben presentarse las demandas, y ella se encarga de analizar cada caso de manera detallada para determinar si existe una negligencia que deba ser sancionada.
Especialidades médicas con mayor riesgo de demanda
Si bien cualquier médico puede enfrentar una demanda legal, hay algunas especialidades que, debido a su naturaleza, presentan un mayor riesgo. Según la Conamed, las especialidades con mayor número de demandas en México durante el 2019 fueron:
Ginecología: 38% de las demandas.
Cirugía general: 24% de las demandas.
Medicina interna: 11% de las demandas.
Ortopedia: 7% de las demandas.
Pediatría: 6% de las demandas.
Causas más comunes de las demandas
Al analizar las demandas presentadas, se identificaron diversas causas que llevaron a los pacientes a iniciar un proceso legal. Algunas de las causas más comunes fueron:
Retraso en el diagnóstico.
Retraso en el tratamiento.
Complicaciones derivadas de tratamientos quirúrgicos.
Falta de comunicación médico-paciente.
Falta de comunicación médico-enfermera.
Ausencia de comunicación entre servicios interdepartamentales.
Es fundamental que los médicos estén conscientes de estos riesgos y trabajen en la mejora continua de sus prácticas, priorizando la comunicación efectiva con los pacientes y manteniendo altos estándares de atención médica. La prevención y la gestión adecuada de los riesgos pueden ayudar a reducir la posibilidad de enfrentar demandas por negligencia médica.
