Los 6 consejos que debes seguir para comunicarte mejor con tus pacientes

Una de las relaciones más íntimas que existen entre personas es la que se establece al interior de un consultorio. Entre un paciente y un médico debe existir plena confianza porque ambas partes se necesitan. Además, es la clave para que exista un correcto diagnóstico que derive en una solución ante el problema de salud inicial.

De ahí la relevancia que tiene la comunicación durante la consulta para que tú como médico obtengas información necesaria para realizar tu trabajo.

Con lo anterior en mente, la plataforma Doctoralia comparte los siguientes consejos para que la relación médico-paciente sea eficiente.

Durante la consulta médica se debe establecer una buena comunicación a partir de un saludo cortés y preguntas estratégicas. No sólo sirve para obtener un diagnóstico acertado, sino que además ayuda a generar una buena impresión. Recuerda nunca ser demasiado intrusivo ni generar cuestionamientos que puedan causar incomodidad en el paciente.
Indica al paciente de forma clara las indicaciones del tratamiento y los medicamentos recetados. Debes decir con claridad para qué funciona cada fármaco y especificar la dosis y los días durante los que deberá consumirlos.
Evita el uso de tecnicismos porque suelen generar confusión entre los pacientes. Siempre debes recordar que ellos no son especialistas en salud como tú y es bastante probable que no te entiendan.
A lo largo de la consulta debes preguntar al menos en un par de ocasiones si existe alguna duda.
La tecnología es una herramienta muy importante que hoy se puede utilizar de distintas maneras. Si lo prefieres, puedes indicarle a tus pacientes que te contacten por otras vías (Twitter, Facebook, WhatsApp) acerca de dudas específicas. Pero para evitar malentendidos siempre les debes especificar el horario en que te pueden escribir.
Finalmente, al seguir todos los consejos señalados lo que más se busca es generar confianza en el paciente. Al hacerlo se logrará una mejor relación y eso derivará en que te conviertas en su médico de cabecera.